Historia versus Economía

Un académico contra el imperialismo económico

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Las contradicciones del vidente Juan de Mercado

El encapuchado Juan de Mercado reaparece en NeG para publicar un largo y razonado artículo sobre un tema que, en esta ocasión sí conoce, la reforma del sistema público de pensiones. En primer lugar, es de agradecer que no insulte a nadie (¿Ve cómo no es tan difícil? ¿Ve cómo no estamos determinados por nuestra naturaleza? Un poco de presión social y preocupación de los mandamases de NeG y usted es capaz de comportarse como un adulto responsable).

No entraré a valorar su exposición técnica, porque no es un tema que me concierne y porque soy partidario de una reforma radical de nuestro sistema de pensiones. No hacia un modelo de capitalización individual como el chileno (no queda claro si esta es la propuesta de JdM), pero sí hacia el diseño de un seguro de cobertura público universal. Es decir, cuantías con un tope máximo más limitado y escalonadas no por las aportaciones realizadas, sino por razones de equidad social, ya que el actual sistema favorece a los empleados públicos frente a los trabajadores del sector privado y considero que es insostenible. Todo esto con la supresión de las desgravaciones por planes privados y otros privilegios que permiten a la banca continuar defraudando al ciudadano. En definitiva, aportar menos a la caja única de la seguridad social, pero que reparta más y más equitativamente. No obstante, aquí discutiré los fundamentos científicos del argumentario de JdM. Ante las posibles críticas que se pueden hacer a su exposición sobre la inviabilidad del sistema de pensiones:

(Dos advertencias:
1. Habrá comentarios que defenderán que otras hipótesis sobre parámetros demográficos o sobre crecimientos de la productividad y de los impuestos pueden permitir que las tasas de cobertura y de sustitución de las pensiones se mantengan en los niveles actuales. Solo contestaré a ellos si vienen acompañados de los cálculos precisos que se utilizan para alcanzar tal conclusión (o de referencias a estudios que presenten tales cálculos).
2. He buscado, con desesperación, este tipo de estudios (es decir, los que presentan escenarios demográficos y macroeconómicos en los que resulta posible mantener el sistema de pensiones con sus condiciones actuales) y no he encontrado ninguno. Sí hay muchos que concluyen que crecimientos de la tasa de empleo, de la productividad y de los impuestos que están dentro de lo posible, no son suficientes para mantener las tasas de sustitución actuales.)

Es decir, exige una prueba científica como la realización cálculos que parezcan coherentes con la realidad futura para estimar las posibles críticas. Es imposible saber cómo se puede prever el futuro razonablemente mediante cálculos si el futuro no es predecible, pero aquí se asume que el futuro es predecible y, después, se espera que se prediga de una forma contraria a la propia predicción. Eso es una antinomia. ¿Si este es el método para predecir el futuro, cómo predeciremos otro futuro con el mismo método? La proposición es absurda y se fundamenta en el gran error de creer que las matemáticas sirven para hacernos cambiar de opinión. Eso es falso. Las matemáticas no son opinables, por lo tanto, no nos pueden hacer cambiar de opinión. Será el uso de argumentos matemáticos los que nos hará cambiar de opinión, pero como las matemáticas no son opinables, no se podrá refutar matemáticamente el uso de esos argumentos matemáticos. En consecuencia, la discusión no estará relacionada en cómo calculamos o hacemos demostraciones matemáticas, sino en su correspondencia con la realidad que se asume como dada y objetiva.

Sin embargo, no es necesario refutar a JdM, porque él mismo se refuta en el siguiente párrafo. Si, anteriormente, escribía sobre la eficiencia y nos demostraba que ésta era predecible matemáticamente, ahora argumenta sobre la equidad:

En materia de pensiones, la equidad tiene que ver, en primer lugar, con el tratamiento relativo de las distintas generaciones (equidad intergeneracional) y, en segundo lugar, de las personas de una misma generación (equidad intrageneracional). Si el propio concepto de equidad ya es elusivo, cuando se le añade el calificativo “intergeneracional” resulta especialmente ambiguo, principalmente porque las vicisitudes históricas que afectan al bienestar de cada generación son imprevisibles. Como dice un colega, a algunos les toca disfrutar de los felices años veinte, a otros soportar guerras civiles y mundiales, y a otros transitar durante las movidas de los años ochenta; a unos les toca disfrutar con el Real Madrid de Di Stéfano, a otros con la quinta del Buitre, y a otros contemplar cómo la selección nacional de fútbol gana campeonatos europeos y mundial(es) y disfrutar (o sufrir) con el Barcelona de Guardiola.

Como podemos observar, la eficiencia está dada y determinada en el futuro por nuestros modelos, pero las vicisitudes históricas que afectan al bienestar de cada generación son imprevisibles. Esto, obviamente, no tiene ningún sentido y demuestra la incoherencia y el sustrato ideológico que se esconde detrás de la llamada ciencia económica. Les puedo prometer que una Guerra Civil afecta, y mucho, a la eficiencia o la productividad de la economía. Lo he estudiado en detalle para el caso del municipio de Quart de Poblet. En definitiva, parece que los buenos economistas sirven, como demuestra JdM, para engañar a la gente.

SIRERA MIRALLES

Carles Sirera Miralles (València, 1981) is a Spanish historian and adjunct professor in the University of Valencia. His principal lines of research focused on the problems of the democratization in Europe, especially during the end of Nineteenth Century and the beginnings of the Twentieth Century. As social historian, he has wrote about the sports and sociability and his thesis, Un título para las clases medias, is one of the most completed and relevant studies on the subject of the secondary school in Spain. His intellectual influences are the Alltagsgeschichte school, Norbert Elias, Fritz K. Ringer and all historians who, although the limitations of our discipline, think that is possible reach some kind of valid, useful and interesting knowledge.